ESTACIÓN DE PENITENCIA

Las normas sobre la estación penitencial han sufrido poca variación a lo largo de los años, normalmente se han mantenido las normas fundacionales y se han ido añadiendo distintos aspectos según la situación de la Hermandad y su crecimiento. Los estatutos fundacionales hacen mención a la forma de hacer la Estación de Penitencia en la madrugada del Martes al Miércoles Santo, mediante la realización de un Via+Crucis. Los hermanos deben ir y volver por el camino más corto, a ser posible solos y no en grupos, siempre cubiertos y en completo silencio, con la mayor compostura, sin cualquier signo externo que posibilite su identificación, como pulseras, anillos o alhajas de ningún tipo, salvo el anillo nupcial. El hábito se compondrá de túnica negra bien colocada, anudada al lado izquierdo por un cordón de calabrote amarillo, con varios nudos y sin borlas en los extremos, antifaz de la misma tela y color que la túnica, en el cual irá prendida a la altura del pecho una cruz amarilla, y zapatos y calcetines negros o bien descalzo. Se reitera este llamamiento a todos los hermanos para que vigilen antes de cada nuevo Martes Santo el estado de su túnica y si, por no encontrarse en las debidas condiciones para ser vestida en nuestra Estación de Penitencia, procedan a su renovación, ya que si los celadores y Diputado Mayor de Gobierno están obligados a revisar los atuendos de los nazarenos, estos lo están a revisarlos con la antelación suficiente que les permita vestir el hábito de nazareno, de conformidad con nuestras Reglas y con el carácter y estilo propios de la Hermandad. La razón de todo esto la conocemos bien: debemos pasar inadvertidos y ser un nazareno más de todos los que acompañas a nuestro Sagrado Titular.

La hora de la salida procesional queda estipulada a las 2,00 horas de la madrugada del Martes al Miércoles Santo. Los Hermanos Nazarenos deben estar en la Parroquia de San Sebastíán a la 1,00 horas, haciéndolo por la puerta de la Sacristía. La Cofradía deberá estar totalmente ordenada a las 1,45 horas, en la que se procederá al rezo de las oraciones de rigor antes de iniciar la Estación de Penitencia.

Una vez iniciada ésta, el nazareno irá en completo silencio, guardando la distancia con el hermano que lo precede, con la mirada siempre al frente y sin mirar atrás bajo ninguna excusa. Igualmente, el nazareno no podrá salir de la fila sin un motivo justificado, el cual, llegado el caso, deberá comunicar al Diputado Mayor de Gobierno.